Pesadila grupal.
Estaba dormida profundamente, no dejaba de moverse se retorcía en toda su cama, balbuceaba y sudaba cuando de pronto sintió, por todo su cuerpo unos escalofríos tremendos, después una sensación de algo pesado sobre su cuerpo, no permitiendo que se moviera, fue tal la sensación de pesadez que le quito la respiración, intento guardar la calma, pero cada vez sentía más peso sobre ella y más temor.
Decidió preguntar qué pasaba, por qué tenía esas extrañas sensaciones, como no recibió respuesta, pues se encontraba sola, nada a su alrededor, aumento la tención en su cuerpo, ya que en ese momento caía a un pozo que parecía no tener fin, la nada se convirtió en un extraño túnel del que no paraba de caer, nunca vio el principio ni mucho menos el final de aquel aterrador pozo, ya no pudo contenerse, la desesperación la dominó, el pánico era incontrolable, pasaron algunos segundos, la caída era interminable, lúgubre y desquiciante.
Trató de gritar con todas sus fuerzas pero un sonido mayor al de sus gritos no permitía que la escucharan, intento gritar nuevamente y así despertar. Intento abrir los ojos y levantarse pero el peso aun no se desvanecía, ella despertó de golpe con una terrible sensación que la mantuvo estupefacta y aturdida.
Este pequeño relato fue la creación de varios colegas y mío, donde cada quien hizo un fragmento tratando que coincidiera y no perder el punto, el cual era no perder el tema que era “pesadillas” ni el desarrollo de la historia.
Tú que piensas es una buena historia que no pierde el sentido o si divaga mucho.
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